La Federación de Vecinos Solidaridad ha propuesto la presentación de una moción contra el proyecto de la nueva Ley General de Telecomunicaciones, moción que llevará al próximo pleno municipal el grupo de Izquierda Unida por la vía de urgencia. Según explican desde el colectivo vecinal, la futura ley -que sigue su trámite en el Senado- “echa por tierra derechos que los ciudadanos hemos conseguido en ciudades como Jerez. Prácticamente nos pueden expropiar nuestras azoteas para colocar antenas”.

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Belén Gómez tiene 39 años y la vida cercenada por una enfermedad de la que nadie encuentra cura. Esta jerezana ha relatado en primera persona el infierno que vive desde 2002, fecha en la que empezó la implantación de antenas de telefonía móvil que ha ido complementada tecnológicamente con la aparición del wifi, multiplicando progresivamente los efectos nocivos sobre la población. Ella es un claro ejemplo de una realidad negada por las autoridades, como se lamenta, con la que sin embargo ha de convivir día a día: el síndrome de hipersensibilidad central o, lo que es lo mismo, la hipersensibilidad a los campos electromagnéticos. “Todo empezó en 2002, cuando colocaron una antena de telefonía móvil en la avenida San Juan Bosco, cerca de mi casa. Entonces comenzaron los dolores fuertes de cabeza y las náuseas, que fueron aumentando hasta que los síntomas se extendieron con una debilidad física extrema”. Leer noticia completa

La lucha contra la proliferación de antenas de telefonía móvil no tiene fronteras locales para la Federación de Vecinos Solidaridad. El organismo jerezano ha iniciado una campaña de denuncia a nivel nacional por la que le están enviando escritos y documentación a todos los representantes, partidos políticos e instituciones que puedan tener algo que decir en este asunto. Así, su comunicado ha llegado a la Presidencia del Gobierno y varios ministerios, todos los partidos españoles (desde los nacionales a los autonómicos), a los defensores del pueblo de Andalucía, España y Europa y los diputados. “Si tenemos que llegar hasta administraciones europeas, lo haremos”, aseguran convencidos desde Jerez.

Los vecinos piden que se regule la reducción de las emisiones, como se hace ya en otros países. “Nadie nos asegura que las antenas no produzcan daños en la salud y por eso vamos a por todas”, indican los representantes vecinales. Recuerdan que más del 40% de las antenas que hay en la ciudad están instaladas de forma ilegal por lo que el problema afecta a todos los barrios.

“Ya tenemos respuesta de Cayo Lara (IU), que ha hecho varias interpelaciones al Gobierno”, aseguran mientras siguen esperando contestación de los demás.

El último episodio vivido en Jerez contra una antena de telefonía movilizó a todo un barrio, La Pita, contra un dispositivo camuflado colocado sin las autorizaciones oportunas. Tras la pertinente denuncia a Urbanismo, la compañía tuvo que proceder a su retirada apenas unas semanas después de haberla instalado. Tras este éxito vecinal, queda aún otro frente abierto: una antena instalada junto a una guardería en la misma zona, que también se ha denunciado.

La batalla al más puro estilo David contra Goliat que mantiene la federación de asociaciones de vecinos Solidaridad con las grandes compañías telefónicas sigue su curso. Aunque el colectivo no ha conseguido frenar la instalación de antenas de móviles en la ciudad, su junta directiva no se da por vencida y ahora centra el foco en el uso de este tipo de aparatos por parte de los más pequeños.

Convencidos como están de que la proliferación de las antenas y la utilización de estos teléfonos es altamente perjudicial, han remitido una carta al Defensor del Menor en Andalucía, José Chamizo, solicitándole que impulse la creación de una campaña de concienciación dentro de la Agenda Escolar 21 contra lo que consideran un uso inmoderado de celulares entre los niños.

La campaña, como especifican en la citada misiva, iría orientada no solo al alumnado sino también a profesores y padres, e incidiría en “los riesgos del uso precoz, indiscriminado y prolongado de teléfonos móviles y otros dispositivos que emiten radiaciones microondas”.

Su petición la cimentan en diversos informes como la recomendación del 17 de septiembre de 2007 de la Agencia Europea de Medio Ambiente, que advierte de que si no se adpotan las correspondientes medidas de protección de la población, ello podría conducir a una crisis de salud similar a las causadas por el amianto, el tabaquismo y el plomo en la gasolina.

Por todo ello, desde la federación instan a las autoridades a que fomenten la instalación de conexiones a internet por cable en los centros escolares y regulen de forma estricta la utilización de teléfonos móviles por parte de los estudiantes en las instalaciones educativas. Aunque en la citada carta, la junta directiva reconoce que siguen sin existir informes concluyentes acerca del perjuicio para la saluad de las antenas, alude a la aplicación del “principio de precaución” recordando que, según el Tribunal de Estrasburgo, cuando existen amenazas de daños graves e irreversibles no se debe utilizar la falta de certidumbre científica total como excusa para aplazar medidas eficaces.