Cuando comienza el curso 2013-2014, en Jerez, quinta ciudad de Andalucía, seguimos “disfrutando” en los Centros Públicos de Educación, de las famosas “caracolas”, esto es las ya endémicas aulas prefabricadas.
Además de la negativa influencia que este tipo de aulas tienen en el bienestar de alumnado y el profesorado, y por consiguiente en el rendimiento escolar y en la calidad de la Educación, suponen también un agravio comparativo difícil de justificar para cientos de niños y niñas de Jerez. Niños y niñas que desarrollan su vida escolar en condiciones adversas y muy distintas al resto del alumnado de su misma ciudad.
Mientras se vende bilingüismo, nuevas tecnologías… mantenemos un chabolismo en la Escuela Pública impropio del siglo XXI y de un país teóricamente desarrollado.
La hipocresía política de la Junta de Andalucía les lleva a continuos parcheos en centros donde la media de su existencia está en torno a los 45 años.
Inútil han sido los llamados Conciertos Educativos, que durante los gobiernos de Pedro Pacheco se proyectaron y ejecutaron en la ciudad y que posteriormente fueron suprimidos en los sucesivos gobiernos del PP-PSOE–PP dejando inconcluso definitivamente el parque de infraestructuras docentes.
Los planes “Mejor Escuela”, OLA y otros de más o menos calado, en gran medida han supuesto un despilfarro cuantitativo y cualitativo ya que se han desarrollado sin el horizonte de un “mapa escolar de futuro” adecuado a la expansión natural de la ciudad, sobre todo en las zonas Este, Noreste y Sur, por tanto sin adecuar la demanda a las infraestructuras necesarias. Aquí radica precisamente el origen y la causa que provoca el mantenimiento de aulas prefabricadas, que lejos de disminuir se mantienen y en el peor de los casos aumentan.
Vergonzantes fueron las declaraciones de una antigua responsable de la Administración Educativa de la Junta de Andalucía, cuando decía: “Tenemos Aulas Prefabricadas para absorber la demanda de la zona”.
Zona que curiosamente coinciden con las anteriormente señaladas, donde además de la nefasta planificación hay que añadir que los centros de Primaria nos están adscritos a centros de Secundaria, como ocurre en el resto de la ciudad , teniendo una proporción de cinco centros de Primaria para tres de Secundaria y un trasvase incontrolado de alumnado que provocan además de los problemas propios de la Educación, los añadidos de ajuste y planificación familiar que en muchos casos son verdaderamente difícil de solucionar.
Testimonio de todo lo anteriormente dicho pueden ser las familias, el profesorado y el alumnado de Centros como San José Obrero, Manuel de Falla, Tartessos, Arana Beato, Antonio Machado (por fin ya iniciándose las obras) y Fernando Quiñones entre otros. Sin olvidarnos de importantes obras pendientes en el Elio Antonio de Nebrija, el Centro “de las promesas”.
Hablamos de centros con una media de 6 años de espera para la erradicación de este panorama tercermundista y sin una esperanza cercana de desahucios de las caracolas.
Finalmente, una pregunta para la reflexión: ¿Hay algún centro concertado y, por tanto, sostenido con fondos públicos de la Junta de Andalucía que cuente con aulas prefabricadas?
Mª Ángeles Gómez Bernal | Coordinadora del Área de Cultura y Educación de Foro Ciudadano de Jerez