La Junta de Gobierno Local ha aprobado el inicio de expediente para la concesión a José Ravelo Rodríguez de la distinción de Hijo Adoptivo de Jerez como reconocimiento a su trayectoria deportiva y profesional, “presidida por una deportividad, actitud y comportamiento ejemplares”. Leer noticia completa

La alcaldesa, María José García-Pelayo, ha entregado el título de Hijo Adoptivo de la Ciudad, al párroco de San Miguel y Vicario Judicial de la Diócesis de Asidonia-Jerez, Monseñor D. Ángel Romero Castellano, en el transcurso de un solemne pleno extraordinario celebrado, esta mañana, en el Cabildo Viejo.

Al acto han asistido también. El obispo de la Diócesis, José Mazuelos, miembros de la Corporación municipal, familiares del homenajeado, el presidente de la comisión, Salvador Escudero, y miembros de la misma, canónigos de la Catedral, sacerdotes, el diputado nacional, Aurelio Romero, representantes de la Academia de San Dionisio, el hermano mayor del Santo Crucifijo de la Salud, Martín Cortés, los tenientes de alcalde del Ayuntamiento de Lebrija, Mª Regla Martínez Bernabé y José Benito Barroso Sánchez, autoridades civiles y militares, feligreses del barrio de San Miguel y amigos.

La alcaldesa ha declarado que “hoy Jerez, te acoge para siempre como un hijo, -o mejor dicho-, hoy Jerez reconoce públicamente que te has ganado a pulso, ser hijo de esta Muy Noble y Muy Leal ciudad”, y ha continuado “tu trayectoria ha sido, y sigue siendo muy fructífera tanto como párroco como Vicario Judical porque, a pesar de tus 86 años, tu fuerza y tu entrega siguen siendo las mismas que las del primer día, y de eso hace ya casi 45 años”.

García-Pelayo ha destacado la calidad humada de Monseñor Don Ángel Romero, así como “su inmensa bondad, sabiduría, generosidad, responsabilidad y comprensión con los demás”. Y ha añadido que “por todo ello, te has convertido en el ángel de San Miguel. Un ángel que nos ha regalado Lebrija y desde hoy nuestro ángel jerezano”.

Además, la regidora ha subrayado que “la ciudad se siente muy afortunada por tenerte aquí, por haber echado raíces en Jerez, por haberte comprometido con nuestra cultura, nuestra sociedad y nuestras costumbres, por tu enorme compromiso con todos los que te rodean y te piden ayuda”, y ha concluido que “en definitiva, nos sentimos muy afortunados y cómplices de tu destino, por tantos regalos que nos has hecho, y nos sigues haciendo de espiritualidad, de caridad y de formación”. Igualmente en su intervención, la alcaldesa ha narrado algunos aspectos personales de Don Ángel, aficiones y anécdotas de su vida personal.

Por su parte, Don Ángel ha agradecido “de corazón” la distinción que le ha entregado el Ayuntamiento de Jerez. Monseñor Romero Castellano ha agradecido también la presencia de los representantes del Consistorio lebrijano “para asistir a este acto, en el que la ciudad de Jerez me abre sus brazos y me adopta como hijo suyo”, ha declarado el párroco de San Miguel, quien además, se ha referido a la localidad hispalense como “la ciudad donde me engendraron y en la que se encuentra el tronco de mi familia”.

Sobre su vida espiritual, Don Ángel ha señalado que “tengo que agradecer a Dios mi bautismo, mi educación en un hogar cristiano, mi elección para el sacerdocio y mis 63 años que llevo ejerciéndolos ayudado de Su Gracia”, y ha continuado “si miro mi vida desde el punto de vista natural, tengo que recordar a mis padres que me criaron y se sacrificaron por mí. Hasta entregarme a Dios en el sacerdocio, así como a mis hermanas y a mis sobrinas que me han querido siempre como un padre, y así me han cuidado y atendido”. Igualmente, el homenajeado, ha agradecido el cariño de “mis hermanos sacerdotes y mis obispos Don Rafael, Don Juan, y Don José en la actualidad, que siempre me han distinguido con su confianza, cariño y amistad”. Además, Monseñor Romero Castellano ha agradecido a su feligresía “las fuerzas vivas de la parroquia” su acogida en el barrio desde el primer día. También, y de forma muy especial “quiero agradecer a la Corporación municipal, y a la alcaldesa, María José García-Pelayo este título que me entregáis, así como reiterar mi compromiso de servicio con mi iglesia y mi ciudad”, y ha concluido “gracias Jerez, porque ya soy también tuyo”.

El concejal responsable del Plan Especial de Promociones Culturales, instructor del expediente de concesión del título de Hijo adoptivo de la Ciudad, Antonio Montero, ha argumentado que “esta distinción se fundamenta en todo lo recogido en el expediente, gracias al Ilustre Colegio de Procuradores de Nuestra Ciudad y a la Comisión creada dentro del seno de Hermandad del Santo Crucifijo de la Salud y María Santísima de la Encarnación para organizar los actos de acción de gracias y reconocimiento de la figura del mencionado, con motivo de la celebración del sexagésimo aniversario de su ordenación sacerdotal” y ha añadido que “junto a sus méritos profesionales, resaltan los que se derivan de su callada, constante y abnegada labor pastoral”.

Igualmente, Montero ha expuesto que “el 29 de septiembre de 1970, día de San Miguel Arcángel, D. Ángel Romero Castellano tomó posesión como párroco y cura propio de la parroquia de  San Miguel de nuestra ciudad, y desde el primer momento,  se incardinó a través de la vida parroquial  en la de nuestra ciudad, en momentos particularmente complicados para ésta y la Iglesia, la recién iniciada marcha de los cambios promulgados a partir del Concilio Vaticano II y los muy próximos a producirse por la transición de régimen político nacional que tuvo lugar pocos años después, contribuyeron a una serie de transformaciones sociales, eclesiásticas y de relaciones institucionales, que fraguaron en D. Ángel una vinculación especial con la parroquia, el barrio y a través de ellos con la ciudad de Jerez, de manera que no puede entenderse el barrio y la parroquia de San Miguel sin él, del mismo modo que él resulta inseparable de aquéllos”.

El ex vicepresidente del Gobierno y hasta hace unos días diputado nacional Alfonso Guerra será nombrado hijo adoptivo de San Isidro del Guadalete, después de que aceptara la petición que le trasladó el alcalde de esta ELA, Antonio Ramos, que se desplazó a Madrid para reunirse con Guerra en el Congreso. En el encuentro, en el que también estuvo presente la diputada y candidata socialista a la Alcaldía de Jerez, Mamen Sánchez, el alcalde pedáneo dialogó con Guerra durante unos minutos (precisamente el día que dejaba el Congreso tras casi cuatro décadas), trasladándole oficialmente la petición, que fue aceptada inmediatamente. 

El nombramiento debe seguir ahora los cauces administrativos legales, en primer lugar la aprobación en una sesión plenaria que se desarrollará durante el mes de enero. Posteriormente se fijará la fecha para la celebración del acto oficial.

Alfonso Guerra ya estuvo en San Isidro en 2001, cuando inauguró una plaza con el nombre de Pablo Iglesias. “Era una acto que recordaba con agrado”, señaló el regidor, que agradeció especialmente que Alfonso Guerra le hubiera recibido en un día muy intenso y emotivo, ya que era el de su despedida del Congreso.

Para Antonio Ramos, los méritos de Alfonso Guerra para ser nombrado hijo adoptivo son de sobra suficientes. “Estamos ante una persona que formó parte de los gobiernos más importantes de la historia reciente de España, que consolidaron la democracia, primero, que emprendieron luego un camino de reformas progresistas que comportaron numerosos avances sociales y en materia de igualdad”.

Alfonso Guerra, de 74 años de edad, se despidió la pasada semana del Congreso de los Diputados, tras 37 años. Es el único miembro de la Cámara que ha ocupado un escaño desde las Cortes Constituyentes. Desde 2008 expresó su intención de dejarlo, pero sus compañeros le convencieron para seguir. Su actividad política, no obstante, continuará, puesto que seguirá al frente de la Fundación Pablo Iglesias, entre otros cometidos.

La alcaldesa, María José García-Pelayo, entregó ayer el título de Hijo Adoptivo de la Ciudad a Pepe Marín, por sus más de cuarenta años dedicados a la promoción del flamenco y la cultura de Jerez, a través de su labor como comunicador, actor y crítico flamencólogo. Al acto asistieron familiares del homenajeado, amigos y un buen número de profesionales y aficionados del mundo del flamenco.

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Ruperto Pozuelo Sánchez ha recibido el nombramiento de hijo adoptivo de Jerez. Fue en un acto el pasado viernes en un pleno solemne y extraordinario, celebrado en los Claustros de Santo Domingo. Decenas de asociaciones y alumnos apoyaron este nombramiento. En primer lugar se leyó el acuerdo de convocatoria del mismo, al que siguió la exposición de motivos para tan meritorio título, a cargo del consejal Bernardo Villar. Persona cariñosa, amable y entregada a los más necesitados, procedente de familia humilde y trabajadora, siempre aprendiendo con sacrificio y trabajo, Pozuelo Sánchez ha estado entregado a la juventud para la formación, intelectual y espiritual.

Ha formado parte de una familia salesiana, que lo ha acogido y apoyado a lo largo de su vida, transmitiendo valores a la juventud, para que en el futuro sean grandes personas y grandes profesionales. El hermano Ruperto agradeció emocionado este nombramiento. Además de su familia, estuvo arropado por miembros de la corporación de la comunidad educativa salesiana y una amplia representación de la sociedad civil. Ha prometido seguir cumpliendo con la consigna de Don Bosco: “trabajo, trabajo y trabajo”. Desde Reporteros Jerez le damos nuestra enhorabuena.

CHARO CONDE

Don Ruperto Pozuelo se levanta cada día a las 6,15 horas de la mañana y a las ocho, como un clavo, está en el colegio, rodeado de jóvenes. Este profesor salesiano tiene 91 años y no falta un solo día a su cita con las aulas, a pesar de que lleva jubilado desde que cumplió los 75 y no tuvo más remedio. Mientras atendía amablemente a Reporteros Jerez en el Lora Tamayo, el pleno del Ayuntamiento de Jerez aprobaba la concesión de Hijo Adoptivo de la ciudad para este entrañable docente cordobés. El acto de reconocimiento se celebrará el 1 de febrero y es todo un acontecimiento para la comunidad educativa salesiana.

“En los años que yo llevo aquí, la juventud ha cambiado como cambia la sociedad. Antes vivían en una sociedad menos adelantada y menos libre y eran más sumisos y obedientes. Hoy los jóvenes tienen más cultura. Son buenos muchachos”, asegura el profesor con una envidiable lucidez física y mental. “Es un don de Dios”, asegura el religioso. Pero don Ruperto tiene una pena y es “ver a los chicos desempleados. Si no estudian con entusiasmo es porque ven el porvenir que les espera. Antes las empresas esperaban a que terminaran de estudiar para contratarlos y ahora no tienen ese aliciente”, lamenta. En los 40 años que lleva en Jerez (60 en total a la enseñanza) miles de chicos han aprendido los secretos de la mecánica de sus palabra por lo que los talleres son su espacio favorito del centro.

Se ruboriza cuando se le recuerda que será nombrado Hijo Adoptivo de la ciudad en unos días: “Yo no lo quiero para mí sino para la congregación y para los que han trabajado conmigo tantos años. No sabía nada hasta hace poco, me lo han tenido oculto”, asegura. Mientras recorre los talleres va describiendo la maquinaria, las diferentes labores que hacen los estudiantes y lo que enseñan los profesores más jóvenes. No se cansa de aprender y las nuevas tecnologías no le pillan desprevenido. “Me gusta la fotografía y el vídeo y siempre voy con mi cámara, que es pequeñita pero hace de todo”, cuenta.

“No hay nadie en el colegio ni en Jerez que no conozca a don Ruperto”

“Don Ruperto ha calado en el colegio y en toda la ciudad. Ha dedicado toda su vida a los jóvenes y sigue haciéndolo”, asegura el director del colegio, Antonio García. A lo largo de esos 40 años de enseñanza en el centro de la avenida Don Bosco, “ha estado muy presente en la concesión de nuevas especialidades de Formación Profesional para el colegio”. Hoy, el Lora Tamayo tiene mil alumnos desde Educación Infantil hasta Grados de FP y Bachillerato.

Y los mejores elogios le llegan de los alumnos: “Es una persona muy llana, siempre tiene una sonrisa en la cara para nosotros”, aseguran Pablo Lebrón, Adrián Sánchez y Sergio Peña, de último curso de Bachillerato. “Nos llama la atención verlo aquí todos los días con lo mayor que es. Aunque no nos ha dado clase nunca, siempre nos pregunta cómo nos van las cosas”, cuentan.

Cincuentenario del colegio Manuel Lora Tamayo

El reconocimiento a Ruperto Pozuelo llega justo el año que el colegio celebra el Cincuentenario de su fundación. Muchos son los actos que se reparten a lo largo de todo el curso para conmemorar la efemérides, desde cenas benéficas a convivencias pasando por misas de acción de gracias, jornadas pedagógicas y una fiesta de antiguos alumnos.

La alcaldesa, María José García-Pelayo, ha entregado hoy al empresario y cofrade José Torreglosa el título de Hijo Adoptivo de la ciudad en el transcurso de un pleno Solemne y Extraordinario celebrado en el Cabildo Viejo Con la presencia de familiares, miembros de la Corporación, de José Mazuelos, obispo de Asidonia-Jerez y de una amplia representación de la sociedad civil vinculada a la vida social, cultural y cofrade de la ciudad, se ha desarrollado esta sesión extraordinaria en la que en primer lugar se ha leído el acuerdo de convocatoria de este pleno, al que ha seguido la exposición de motivos del meritorio título, a cargo del delegado de Participación Ciudadana y Coordinación de Distritos e instructor de la causa, José Galvín.

La alcaldesa ha destacado que con este nombramiento, “el Ayuntamiento y la sociedad jerezana reconocen el extraordinario valor humano y profesional de José Torreglosa, una persona que  siempre ha mostrado su permanente disponibilidad a favor de los más necesitados y que con su empresa, Mármoles Jerez, ha dado toda su vida y cariño a Jerez”. Pelayo ha asegurado que durante la tramitación de expediente “nadie planteó objeciones a este título que tanto te mereces, porque desde los 19 años lo has dado todo por Jerez”.

La alcaldesa ha tenido un especial recuerdo hacia Isabel Sánchez Lobo, esposa de José Torreglosa, y también hacia su padre, “porque gracias a él te viniste para Jerez”. “No te veas en este título como un privilegiado, los privilegiados somos nosotros por tenerte en Jerez, te estamos enormemente agradecidos por lo que nos ha dado”, ha añadido.

La regidora ha ensalzado la labor solidaria ejercida por Torreglosa durante sus mandatos como Hermano Mayor de la Cofradía del Sagrado Descendimiento de Nuestro Señor Jesucristo y de Nuestra Madre y Señora de la Soledad. También ha hecho referencia a la donación que Torreglosa y su esposa hicieron del majestuoso retablo cerámico de la portada de la Iglesia de la Victoria por la calle Ponce, así como el arreglo completo del sagrario de dicho templo.

En el plano profesional, ha recordado la trayectoria del empresario sevillano “desde que a los 21 años abrió su primera empresa trabajando en pro de nuestra ciudad” y lo ha puesto como ejemplo de emprendedor, dueño de una empresa familiar “que también hace familia con sus trabajadores”.  “Tu formas parte de la historia de esta ciudad. Has puesto tu amor y tu cariño en numerosos edificios de la ciudad: en el Ayuntamiento, el aeropuerto, estatuas, iglesias; hoy tenemos que estar aquí para reconocerte este esfuerzo y esta entrega”, ha subrayado.

“Empresarios como tú sois los que contribuís cada día a la economía de esta ciudad, al empleo, y en tu caso también, a la conservación de nuestro patrimonio histórico artístico, pues el sello de Mármoles Jerez está marcado en las obras realizadas en los edificios más importantes de esta ciudad, en los que has dejado tu huella”, ha destacado la alcaldesa.

Emocionado

José Torreglosa, visiblemente emocionado y tras recordar a su esposa, ha dado las gracias a la Corporación y a toda la ciudadanía de Jerez “por este reconocimiento que recibo con ilusión y cariño”. “Tengo que reconocer que los mejores momentos y recuerdos de mi vida están en Jerez. Y como dice el dicho: no todo el mundo puede ser de Jerez pero yo hoy ya lo soy de hecho y de derecho”, ha enfatizado.

Por su parte, el instructor de la causa, José Galvín, ha recordado que “su vinculación laboral con nuestra ciudad comenzaría con tan sólo 18 años, cuando siendo ya un profesional aventajado por la realización de importantes trabajos realizó las obras de los primeros edificios construidos en la avenida Alcalde Álvaro Domecq y la obra de la oficina central de la llamada por aquel entonces Caja de Ahorros de Jerez situada en la plaza del Arenal. Esta obra fue el motivo por el que su vinculación profesional con Jerez se convirtiera en una vinculación personal, ya que durante el tiempo en el que se realizaron estos trabajos conoció a Isabel Sánchez Lobo, que se convirtió en su esposa en mayo de 1965 en la jerezanísima Iglesia de San Miguel”.

Galvín ha señalado que “es de justicia que esta ciudad lo nombre Hijo Adoptivo por su dedicación en pro de nuestra ciudad, por su constancia en ayudar a los más necesitados, por su carácter dialogante y mediador, así como por hacer suyas nuestras más arraigadas tradiciones”.

Cerrada la fase de información prevista en el Reglamento de Honores y Distinciones, a la misma han comparecido numerosas personas e instituciones, entre las que cabe destacar, adhesiones de Instituciones tales como el Obispo de la Diócesis de Asidonia – Jerez, la Unión de Hermandades de Jerez, la Asociación Santo Ángel de la Policía de Jerez y las cofradías jerezanas,  así como numerosos particulares que han querido expresar su apoyo a este nombramiento por su responsabilidad con la sociedad.

La Junta Local de Gobierno ha dado luz verde al inicio del expediente de concesión a José Torreglosa de la distinción de Hijo Adoptivo de la ciudad. Entre los méritos expuestos figuran los excepcionales valores humanos y la  disponibilidad de este empresario y cofrade jerezano al servicio de los más necesitados como principales argumentos para la obtención del título que otorga el Ayuntamiento en base al reglamento municipal de honores y distinciones. También el expediente hace referencia a la entrega de José Torreglosa a Jerez y su actitud constante para favorecer el diálogo y la convivencia.

Con más de cincuenta años de experiencia en el sector de la construcción, José Torreglosa ha sido durante 12 años hermano mayor de la Hermandad de la Soledad que recientemente le ha concedido el título de hermano mayor honorífico. En su labor humana destaca también su servicio a hermandades y congregaciones religiosas como los salesianos o las hermanas de Belén, así como su contribución y colaboración permanente con el comedor del Salvador.

José Torreglosa fue nombrado por el Ayuntamiento en 2009 rey mago y ha sido también distinguido por la asociación Santo Ángel de la Policía Nacional con la medalla de oro.