Carlos Orúe salió satisfecho del amistoso en Nueva Jarilla, dónde el Xerez Deportivo logró su primer trofeo de la historia. Las primeras palabras del preparador fueron para recordar que “todavía es joven el equipo, pero no ha tardado mucho en llegar el primer trofeo. Es para estar contentos”.
En lo méramente futbolístico Orúe consideró que el duelo le vino bien a su equipo porque “a lo largo de la temporada nos vamos a encontrar campos como este, a no ser que decidan jugar en Chapín, como ha ocurrido en la primera jornada. Pero había que ver como los jugadores se adaptaban a esta superficie, al arbitraje o al contacto cuerpo a cuerpo en un terreno de juego tan pequeño”.
De hecho, el técnico reconoció estar bastante satisfecho tras el amistoso en Nueva Jarilla: “La verdad que me voy con un sabor de boca muy dulce porque he visto al equipo respondiendo, sobre todo cuando ha estado la base del equipo inicial. Después, con los cambios se ha notado algo, pero también los chavales se han machacado”.