La Policía Nacional ha detenido a dos hombres, A. L. M. y J. M. A.M, junto con dos mujeres, Y C.M. y a A.M A.M, como presuntos autores de un delito contra la salud pública. Los tres primeros cuentan con antecedentes por varios delitos, entre ellos robo con violencia, hurto y tráfico de drogas.

La Policía Nacional apunta que se dedicaban presuntamente a la venta de sustancias estupefacientes utilizando para ello una vivienda de San Benito. Desde allí, los arrestados se dedicaban al menudeo, es decir la venta directa a los consumidores que personalmente se desplazaban al lugar para adquirir droga de diverso tipo.

Añade que la investigación policial demostró que cada uno de los detenidos desempeñaba “un papel determinante y concreto” en la actividad delictiva, ejerciendo alguno de ellos funciones de venta directa y los otros de apoyo y colaboración en dicho negocio, perteneciendo todos los arrestados a una misma familia.

Una vez localizados y  detenidos, se realizó, con la pertinente autorización judicial, el registro de la vivienda que utilizaban para sus actividades, encontrando diversas cantidades de sustancias estupefacientes y dinero en efectivo, y siendo incautado un vehículo tipo turismo así como varias armas blancas.

Durante la operación se localizaron a diez personas con distintas cantidades de droga que habían adquirido a los arrestados, incautándoles dichas sustancias y  proponiéndoles para sanción ante la Subdelegación de Gobierno en Cádiz por tenencia de sustancias estupefacientes en vía pública.

La Guardia Civil ha detenido en Cádiz a quince integrantes de una organización de traficantes de hachís que, además, robaban el estupefaciente a otros narcotraficantes y cometían secuestros y torturas, en una operación en la que han sido incautados 500 kilos de hachís. La operación, denominada “Takata-Jacaranda”, se inició a raíz de que un grupo de encapuchados asaltara con armas largas en Chiclana a unos narcotraficantes y les arrebataran el vehículo y la embarcación que llevaban en un remolque y en la que ocultaban 500 kilos de hachís. Tras las primeras investigaciones, la Guardia Civil logró detener a los asaltantes y recuperar el vehículo y la embarcación que habían robado.

Según los investigadores, los ladrones y sus víctimas “pertenecían a la misma organización delictiva” pero los primeros pretendían quedarse tanto con la droga que transportaban sus compañeros para terceras personas como con el dinero que les habían pagado por sus servicios. Los agentes registraron después sus domicilios en Sanlúcar y Jerez, así como dos naves industriales preparadas para ocultar la embarcación y descargar la droga. En el interior de una de las naves se localizaron cinco turismos robados y juegos de placas de matrícula falsas, bates, defensas policiales, martillos y otros efectos utilizados para amenazar a sus víctimas.

Cuando se estaban realizando estas investigaciones y detenciones, la Guardia Civil tuvo conocimiento de que tres personas habían sufrido un secuestro y habían sido agredidas con violencia en las inmediaciones de sus domicilios por parte de un grupo de personas encapuchadas y armadas. Una de las víctimas fue abordada cuando circulaba por un camino de Chipiona. Tras inmovilizarle, le introdujeron en un turismo golpeándole mientras le interrogaban para saber el paradero de una partida de hachís y necesitó ir a un hospital para tratarse las heridas.

Estas pesquisas llevaron a la detención de tres personas responsables de estos secuestros en Sevilla y al registro de la vivienda del principal cabecilla de esta organización, donde hallaron numerosas pruebas de su participación en los hechos que se le imputan, como grilletes de un solo uso, placas de policía falsas y abundante documentación.

La operación, que continúa abierta por lo que no se descartan nuevas detenciones, ha sido desarrollada por el equipo de Policía Judicial de Chiclana y el equipo de delitos contra las personas de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Cádiz. El Juzgado de instrucción número 2 de Sanlúcar se ha hecho cargo de las diligencias.

Un Juzgado de lo Penal de Cádiz acogerá mañana jueves el juicio contra un individuo, Juan Manuel G. B., acusado de haber convertido presuntamente su vivienda en un negocio de la droga. Junto a él, se sentarán en el banquillo José Manuel A. B., Sebastián B. I. y Miguel S. M., a los que se procesa por formar parte supuestamente de esa red de narcotráfico. Como consta en la calificación del fiscal, a la que este medio ha tenido acceso, todo partió de un control policial realizado en septiembre de 2010, por el que los agentes hallaron en un vehículo en el que viajaban dos de los acusados 215 gramos de hachís valorados en 1.126 euros.

A través de una investigación posterior, la Policía averiguó que esta sustancia había sido comprada presuntamente a los otros dos procesados, que según el fiscal se dedicaban a la venta de estupefacientes. Los agentes procedieron entonces al registro del domicilio de uno de ellos, Juan Manuel G. B., situado en la barriada San Cristóbal, comprobando que era allí donde supuestamente y de forma habitual se llevaba a cabo la actividad ilícita. Entre otros objetos, los funcionarios intervinieron en la citada parcela una balanza, 2.637 euros, una libreta con anotaciones, dos cuchillos y un rollo de film transparente, relacionando todo ello con la compraventa de droga, además de casi 9.000 gramos de hachís y tres plantas de marihuana, cuyo valor total en el mercado alcanza los 10.000 euros.

En el inmueble se incautaron también 39 cartuchos de balas de 9 milímetros, sin que constase licencia alguna para ello. A juicio del Ministerio Fiscal, los hechos constituyen un presunto delito contra la salud pública del que serían autores los cuatro procesados y para los que pide dos años de cárcel. Además, deberán afrontar multas que en dos de los casos rozan la cifra de 20.000 euros

La diputada y portavoz adjunta del Grupo Parlamentario Socialista, Mamen Sánchez, va a registrar una proposición no de ley en el Congreso solicitando a Gobierno que mantenga la plaza de fiscal antidroga en  Jerez, ante la decisión tomada por el Ejecutivo del PP de quitar el fiscal de refuerzo que tenía dedicación exclusiva en temas de narcotráfico y que “tan buenos resultados ha dado”.

Recuerda que esta plaza se creó en enero de 2010.  “Fue una plaza muy demandada por los profesionales, policías y colectivos de lucha contra la droga, y la defendí en el Congreso para su aprobación”, apunta. Añade que la petición fue recogida por el Gobierno socialista, que apostó por constituir la tercera plaza de fiscal antidroga en la provincia de Cádiz. “Este Fiscal llevaba a cargo los juzgados de Jerez, Sanlúcar, Rota, Ubrique y Arcos, lo que equivale a 14 juzgados de Instrucción, tres de lo Penal y la Sección 8 de la Audiencia Provincial”, explica la diputada socialista.

“Con esta Fiscalía -añade Mamen Sánchez-  se ha podido trabajar en exclusiva en temas de drogas en Jerez, la Sierra  y toda la Costa Noroeste, se ha repartido mejor la carga de trabajo, se ha ofrecido una mayor coordinación y eficacia con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, ha permitido articular mecanismos especializados en la lucha contra la criminalidad organizada en materia de narcotráfico y se han podido controlar mejor los procedimientos judiciales que abordan la investigación de las organizaciones que se dedican al tráfico de drogas”.

“Entonces –se pregunta la diputada socialista- ¿por qué quitar una plaza de fiscal que está funcionando tan bien? ¿Por qué recortar una plaza de fiscal que ha dado seguridad a una zona comos es Jerez y la Costa Noroeste tan castigada por el narcotráfico? El PP está desmantelando lo que los socialistas creamos para luchar contra el narcotráfico y el crimen organizando, primero cerrando el GRECO de Jerez y Costa Noroeste y ahora quitando el Fiscal antidrogas“

Mamen Sánchez recuerda con añoranza el esfuerzo para conseguir en  la legislatura pasada que Cádiz fuera la única provincia con tres grupos GRECO y tres Fiscales Antidrogas.  “Y con ello -añade- se completó  el mapa provincial de  investigación, persecución y represión del narcotráfico, blanqueo de capitales y bandas organizadas, contando con una política de medios y grupos especializados tanto de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado como de Fiscales. Eso ya no existe, hoy tenemos menos medios para luchar contra eso y nos sentimos más inseguros”.

RESPUESTA DE FISCALÍA

La respuesta de la Fiscalía Provincial de Cádiz no se ha hecho esperar. A través de un comunicado dice lo siguiente:

“Desde el  año 2007 un miembro de la Fiscalía de Área de Jerez de la Frontera realiza en  esa importante demarcación territorial las labores propias de un Delegado de la  Fiscalía Especial Antidroga, aunque formalmente sólo existen dos plazas de  delegados en la provincia, una en Cádiz y la otra en Algeciras. Se actúa de este  modo con autorización de la Fiscalía General del Estado.

Por esta  jefatura se ha solicitado en los últimos años en dos ocasiones que se cree  formalmente una plaza de Fiscal Delegado de la Fiscalía Especial Antidroga en la  Fiscalía de Jerez de la Frontera, petición que incluso ha sido avalada por el  Fiscal Jefe de la Fiscalía Antidroga, y que no ha sido atendida aún por razones  presupuestarias.

Cuestión  diversa es que a fines de 2012 se nos retiró la plaza de Fiscal de Refuerzo con  que contaba la Fiscalía de Área de Jerez de la Frontera desde enero de 2010.  Ahora bien, no es tal fiscal de refuerzo quien actúa como Delegado Antidroga en  Jerez ni el desempeño de éste se ha visto alterado por tal disminución de  plantilla”.

Viene a decir, por tanto, que la plaza en cuestión se trataba de una plaza interina que ahora no se ha renovado como tal.

La Policía Nacional ha detenido a dos jóvenes que han sido imputados como presuntos autores de un delito de tráfico de estupefacientes. Sus identidades responden a las iniciales A.N.I. y A.R.P, tienen 19 y 21 años y carecían de antecedentes policiales.

La actuación policial fue sobre lo que se conoce como un punto negros de venta de droga, concretamente dedicado ’al menudeo, , según apunta la propia Policía Nacional, que añade que su labor al respecto presta especial atención habitualmente a las proximidades de centros recreativos, de mayores, centros de salud o los de colegios y centros docentes.

Esta actuación se llevó a cabo en la mañana del martes tras unas labores continuadas de investigación cerca de dos centros escolares (institutos) ubicados en la zona sur, donde además de proceder a la detención de los dos jóvenes se pudo incautar varios trozos de sustancias estupefacientes (hachís) e instruir asimismo varias actas. El cuerpo policial da así por desmantelado el citado punto negro de venta de drogas.

Los detenidos junto a las diligencias instruidas fueron puestos a disposición de la autoridad judicial competente.

La Policía Nacional ha desmantelado otro “punto negro” de venta de drogas. En este caso el domicilio del presunto traficante estaba ubicado en la barriada jerezana de El Pelirón y en el registro se intervino además de la droga y dinero, diversos útiles relacionados con un invernadero-secadero para estupefacientes. Al detenido, I.M.N. de 25 años, se le acusa de un presunto delito contra la salud pública.

Leer noticia completa

Las multitudinarias fiestas pastilleras que de vez en cuando se celebran en la ciudad, especialmente en polígonos industriales, raras veces se saldan sin incidentes. La llevada a cabo el pasado sábado no podía ser una excepción y acabó con una agresión con arma blanca, además de incautación de estupefacientes y otros episodios menores. Como han informado fuentes del caso, todo ocurrió a alrededor de las tres de la mañana, en plena fiesta ubicada en un local de celebraciones del Polígono Empresarial Oeste.

La Policía Nacional había desplegado un amplio operativo, que incluía dos dotaciones de la UPR (Unidad de Prevención y Reacción), ya que los agentes conocían la organización del evento con varios días de antelación. A la hora señalada, se produjo un gran revuelo ya que un individuo había “pinchado” a otro en la pierna en plena fiesta. Los funcionarios allí apostados asistieron a la víctima y llamaron a los servicios sanitarios, mientras buscaban al agresor entre la multitud de cientos de personas, que podía llegar al millar. Desafortunadamente el autor del ataque consiguió escapar y perderse entre el tumulto, mientras una ambulancia trasladaba a la víctima al Hospital del SAS.

Según estas fuentes, a pesar de lo que pareció en un principio las lesiones del joven no revisten gravedad. Por lo demás, la investigación sigue abierta aunque la Policía no tiene muchos indicios acerca de la identidad del agresor. En la fiesta, por otro lado, los agentes de Estupefacientes también intervinieron incautando diversas sustancias en un evento en el que el trapicheo corrió a raudales. Según los profesionales, jóvenes de diversos puntos de la provincia y de fuera de ella se dieron cita en el Polígono Oeste, convocados principalmente a través de las redes sociales.

Delinquió dos veces realizando la misma actividad en un solo día, y por eso precisamente la Audiencia Provincial ha considerado que se trató de un único delito y ha absuelto a un individuo juzgado por traficar con droga en la segunda de las ocasiones expuestas. Como consta en la sentencia, a la que Reporteros Jerez ha tenido acceso, queda probado que el procesado recibió un paquete postal desde Argentina el 6 de mayo de 2011, que contenía algo más de 172 gramos de cocaína.

Se da la circunstancia de que no pudo recoger la mercancía porque se encontraba detenido, ya que el mismo día se había hecho con otro paquete de similares características, en cuyo interior se hallaban  casi 149 gramos de la misma sustancia. En el escrito, el juez explica que el sujeto ya fue condenado por esta última acción, lo que ha sustentado el fallo absolutorio en lo referido al otro paquete al considerar que se trató de una única actividad delictiva. En concreto, el magistrado argumenta que ambos hechos conforman un solo delito contra la salud pública puesto que “las distintas acciones de tráfico no son sino ejecuciones parciales y fragmentarias de un plan preconcebido”.

Siguiendo este razonamiento y como ya fue condenado por el primero de los hechos, el juez decreta que se trata de un asunto ya juzgado. Cabe señalar, además, que está prohibido someter a un proceso judicial a un imputado dos veces por la misma acción. Por todo ello, y a pesar de que se reconoce absolutamente su culpabilidad, la Sección Octava de la Audiencia Provincial le absuelve del delito contra la salud pública decretando el decomiso de la droga incautada y declarando de oficio las costas procesales.

La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial a 20 personas como presuntos integrantes de una organización criminal que se dedicaba al tráfico de cocaína entre Madrid y la provincia de Cádiz. Como consecuencia de esta operación, denominada ‘Aceituno’, se han incautado más de cuatro kilos de cocaína, dos de hachís y medio de marihuana, más de 54.000 euros en metálico, 5 vehículos, así como más de 10 kilos de distintas sustancias y numerosos efectos para la elaboración y corte del estupefaciente.

Esta operación policial se inició como consecuencia de otra anterior denominada ‘Mirlo‘ en la que, de forma conjunta con el Cuerpo Nacional de Policía, se desarticuló una trama dedicada al tráfico de cocaína en las localidades de El Puerto de Santa María (Cádiz) y El Cuervo (Sevilla). En esta operación se detuvo a 19 personas y se incautaron 3 kilos de cocaína y diversas cantidades de otras drogas. Entre los detenidos por esa operación se encontraba el principal investigado por la operación Aceituno, Eduardo H.B., de 31 años de edad, natural y vecino de Jerez, el cual retomó su actividad ilícita en cuanto salió de prisión.

Dos canales de distribución

Las investigaciones destaparon que esta persona estaba al frente de una organización dedicada al transporte de cocaína entre Madrid y la provincia de Cádiz, contando con dos líneas principales de distribución. De la primera de ellas, se encargaba Juan Carlos G.L. de 41 años y vecino de El Puerto de Santa María, que se dedicaba a la distribución y venta de cocaína en esa localidad y en El Puerto de Santa María, Puerto Real y San Fernando, además de recoger los beneficios económicos con los que financiaban nuevas compras de cocaína en Madrid.

Al frente de la segunda línea estaba Francisco Javier G. G., el cual se encargaba de la distribución de la droga en Jerez utilizando una casa en la que se ejercía la prostitución, donde se suministraba tanto a clientes como a otros camellos para su venta al por menor y a otras personas que frecuentaban la vivienda con la única finalidad de la adquisición y consumición de sustancias estupefacientes. A su vez utilizaba a otros dos miembros de la organización, uno de ellos su propio padre, para la distribución en la localidad de San José del Valle y pedanías colindantes, donde contaban con otras personas para la posterior distribución de la droga.

Una vez identificados los principales miembros de la organización afincados en la provincia de Cádiz, así como a las personas que empleaban, el pasado día 17 de julio se procedió a la explotación de la primera fase de la  operación, en la que se detuvo a 12 personas y se imputó a otras seis, efectuándose siete registros domiciliarios en los que fueron halladas numerosas dosis de cocaína y hachís, balanzas de precisión, grandes cantidades de dinero en efectivo, así como medios electrónicos y de comunicación que eran utilizados para la comisión de los delitos, quedando desmantelada la parte principal de la organización.

El estudio de la documentación incautada y las declaraciones de los detenidos permitieron continuar con la segunda fase de la operación. A principios del mes de agosto, los investigadores procedieron a la total desarticulación de la organización delictiva, tras la identificación de los miembros de la organización que residían en la localidad de Madrid. Esta rama preparaba el suministro de importantes cantidades de cocaína para su traslado a la provincia de Cádiz, para lo que se servían de dos correos, los cuales también fueron detenidos, a pesar de las fuertes medidas de seguridad que adoptaban para evitar ser detectados por los agentes.

Laboratorio de cocaína en roca

Simultáneamente se procedió al desmantelamiento de un laboratorio para el tratamiento de la cocaína ubicado en un domicilio madrileño, principal canal de distribución, donde se incautaron unos tres kilos de cocaína en roca de un altísimo nivel de pureza, así como cocaína en polvo preparada en dosis de distintos tamaños, 10 kilos de precursores para el corte, 2 kilos de hachís, más de cien comprimidos de distintas marcas utilizados para aumentar la potencia sexual.

Además se han incautado numerosos medios y herramientas como molinillos, prensas, pesos, básculas, envasadoras al vacío, máquinas de recuento de billetes, máquinas destructoras de papel y plástico, secadoras, bombillas de alto consumo, bolsitas con precintos, plásticos para el recubrimiento de la cocaína compactada así como para elaboración de dosis, además de 54.000 euros en metálico. Los agentes tuvieron que descubrir un ingenioso sistema electrónico de ocultación para poder acceder al interior del laboratorio.

Los detenidos y todo lo incautado han quedado a disposición del titular del Juzgado de Instrucción nº 4 de Jerez.

La noticia la adelantó Reporteros Jerez el pasado 3 de septiembre: el Ministerio del Interior tiene pensado desmantelar el Greco (grupo contra el crimen organizado) como ya ha hecho en otras provincias del país. Ahora, el subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, no solo lo ha desmentido sino que ha realizado la sorprendente revelación de que se trata de un grupo itinerante que solo actúa en la zona de manera puntual conforme a las necesidades de la misma. “El Greco son unidades que vienen y van -ha explicado el subdelegado- en función de lo que se está investigando. No hay una adscripción física como tal, ya que depende de los operativos que estén en marcha. Por tanto no se trata de que se vayan de Jerez; el grupo investigará donde lo tenga que hacerlo y luego volverá a Jerez cuando tenga que seguir investigando”.

Una explicación que dista mucho de la información facilitada por la Policía Nacional e incluso el propio Ministerio en numerosas ocasiones, en las que se ha asegurado que el Greco es una dotación de 8 funcionarios con sede fija en un local de Jerez, desde donde se coordina la actuación en otros puntos de la provincia como la Costa Noroeste. Un equipo presuntamente fijo, además, que se implantó en 2009 por la peculiaridad de esta tierra en cuanto a la afluencia de narcotraficantes. Sea de un modo u otro, De Torre ha reiterado que “no se van a reducir efectivos” en este sentido.

En cuanto a la presunta itinerancia de esta unidad, resulta curioso mencionarla justo el día en el que ha trascendido que la provincia de Cádiz ostenta el dudoso honor de encontrarse a la cabeza de España en incautaciones de heroína y hachís, siendo cuarta en intervenciones de cocaína durante el año 2011. A este respecto, el subdelegado ha reconocido que las cifras son mejorables (119.833 kilos de hachís y 117,7 de heroína) si bien garantiza que se producirá una evolución positiva.

Por último, De Torre también se ha referido a comisarías “descuidadas” en cuanto a infraestructuras como la de Jerez, en las que no se han realizado obras en mucho tiempo. “Esto no afecta a la operatividad -ha puntualizado-, pero sí a la dignidad de la prestación del servicio… Desde que hemos llegado estamos cambiando cosas y estamos pendientes de cómo funciona todo”. Por el momento, y a pesar de las continuas demandas de los agentes, no parece probable que las mejoras se vayan a acometer en un corto espacio de tiempo.