Pepichi Torres tiene por delante al frente del Xerez B una temporada muy ilusionante. Su último año en el Juvenil de División de Honor fue fantástico a pesar del descenso, sobre todo por el nivel que dieron muchos de sus jugadores. Ahora, con un equipo prácticamente nuevo, confía en cumplir con los objetivos y estar centrados exclusivamente en lo deportivo.
-¿Cómo afronta esta nueva temporada?
-Con mucha ilusión, ahora habrá más transparencia en todo y tranquilidad. No será lo del año pasado, que siempre estábamos rodeados de incertidumbre, de si iba a salir o no el equipo, o de si íbamos a jugar o no en cada jornada.
-Es una época de cambios en la plantilla muy grande…
-No queda nadie de mi plantilla de la temporada pasada. Pero estoy seguro de que haremos cosas grandes con la que tenemos ahora. Son 23 futbolistas y todos nuevos, queda mucho trabajo por delante pero irá todo bien. El Xerez B hará un gran año.
-¿Cómo se queda tras la marcha de muchos juveniles?
-Para mí es una buena señal de que hicieron las cosas bien. Y me da alegría que todos están jugando en una categoría superior. El trabajo que se hizo, en lo deportivo, fue sensacional, aunque no puedo decir lo mismo en el tema institucional.
-El filial estará también para surtir de jugadores al primer equipo. ¿Qué tal con Jesús Mendoza?
-Por ahora he hablado poco con Jesús, somos gente de fútbol y eso es un gran paso para que todo vaya bien.
-Mañana jueves tendrán su primera prueba de la pretemporada ante el Antoniano, un rival de la Primera Andaluza sevillana…
-Es un partido para observar a los jugadores, cómo se comportan en un examen importante para ellos y lo que nos podemos encontrar después en la Liga. También es atractivo porque vamos a jugar en mi pueblo.