Hace tiempo que se viene hablando en este país de los países tercermundistas de forma crítica que nacen los niños y niñas, se hacen mayores envueltos en guerras, maltrato, violaciones y un largo etcétera. Y yo digo que miren hacia atrás, que una cosa parecida está pasando en este país llamado España con el tema del río Guadalete. Hay una generación que ha nacido con el problema del río Guadalete, porque mirad la edad que tienen ya los que nacieron en el año 1983, 30 años, toda una vida con la psicosis de qué va a pasar en el próximo año y preguntarán qué pasó en el año 1983.

Pues pasó nada más y nada menos que empezó la pesadilla del río Guadalete, cuando se construyó el viejo azud que ha sido demolido para construir el nuevo, que dicho sea de paso, tenía que haber estado terminado en el año 2006. Ahí está el interés que han tenido y tienen por solucionar el grave problema que tiene el río Guadalete, y el sin vivir que tenemos y vamos a seguir teniendo toda la vida sin que no haya nadie que lo impida, y se les llena la boca hablando que somos un país moderno y civilizado entre comillas, y mucho hablar de derechos humanos, y yo pregunto dónde está la humanidad cuando se están cometiendo estas injusticias, no se puede criticar a los demás cuando se están cometiendo las mismas barbaridades, para criticar, primero hay que predicar con el ejemplo.

Porque todo esto es lo que está pasando con los vecinos que vivimos en la ribera del río Guadalete, una situación que no la hemos acarreado nosotros, sino aquellos que hicieron los estudios de las infraestructuras, que al parecer no tenían mucha idea de lo que estaban haciendo, y me estoy refiriendo a algunas en concreto, como por ejemplo el azud que se construyó en los años 1983 y que los vecinos de El Portal denunciamos en su momento y advertimos que ese tipo de obra sería la muerte del río Guadalete y que el tiempo nos ha dado la razón porque nadie ha hecho por impedirlo, y a renglón seguido se proyectó el segundo azud móvil en el año 2004. Comienzan las obras teniendo que estar terminada en el año 2006, que dicho sea de paso tampoco le daba solución al río, por lo tanto, más de lo mismo, y vengan miles de millones de pesetas y ahí está eso, 7 años de atraso en las obras y aquí no pasa nada, sigue por años empeorando la situación del río y al mismo tiempo la de tantos miles de ciudadanos y ciudadanas. Pero aún hay más, aquí es donde viene el gran error humano o mejor dicho fallo técnico, y nos estamos refiriendo a la construcción de la autovía Los Barrios-Jerez en el tramo comprendido entre Las Pachecas y La Corta, eso ha sido de juzgado de guardia, y si no, ahí están los resultados de los años 1996, 2009, 2010 y 2013, los errores de unos señores que se creen sabelotodo y de unos gobernantes que les importa un pepino los sufrimientos de los que suframos y al final lo pagamos los mismos de siempre, unos ciudadanos inocentes del monumental fallo de aquellos que se creen que todo lo saben sin importarles un pepino que estén en peligro muchas vidas humanas.

Pero desgraciadamente estamos en un país que todo vale, con darle una palmadita en la espalda para decirle: hombre, intenta hacerlo mejor. Eso es lo que pasa en este país, desgraciadamente nadie asume responsabilidad, como si de un juego de niños se tratara, lamentable, un país de irresponsables, y después tienen la desfachatez de venir cuando tienen los problemas encima, y decir una y mil veces todo está en marcha, y el pueblo noble y sencillo, se lo vuelve a creer. Indignante en manos de quien estamos.

Yo, desde aquí hago un llamamiento a todos y todas los afectados por el río Guadalete,  digamos ¡basta ya!, tomemos medidas más contundentes, porque de lo que estoy totalmente convencido si el río Guadalete pasara por la Calle Larga, estaría resuelto hace muchísimos años, entonces, somos nosotros los que tenemos que luchar para que de una vez por todas hasta aquí hemos llegado y a los hechos me remito, qué han solucionado desde 1996, promesas y más promesas, pasa un año, pasan 10 años, pasan 20 y al final sufrimiento y más sufrimiento, y dónde están aquellos que tanto prometieron. Entonces vecinos y vecinas no nos dejemos engañar más, digamos ¡basta ya!, nosotros no vamos a parar hasta que como venimos diciendo hace muchos años, la recuperación del río pasa por el dragado en primer lugar, y en segundo todo su espacio, lo demás es marear la perdiz como llevan hace más de 25 años y no querer coger el toro por los cuernos, y todo por sus propios errores, hay que plantarles cara a estos manipuladores sin escrúpulos, vecinos y vecinas juntos podemos.

DIEGO ALMODÓVAR ORTIZ | Presidente de la Asociación de Vecinos “El Guadalete” El Portal

Creyente o no, la mayoría es consciente de que la Semana Santa es una época de íntima reflexión, de catarsis colectiva. Una celebración que también tiene mucho que ver con la primavera, donde la vida renace y la naturaleza recupera su esplendor. Y como nada sucede por casualidad en esta vida, algo o alguien ha querido que la sentencia del TSJA se dicte y publique justo antes de iniciarse esta Semana de Pasión. Un año después de iniciarse el calvario para tantos trabajadores y sus familias y amigos. Su contenido es claro: confirma que el despido masivo perpetrado por el gobierno local del PP en el Ayuntamiento no se ajusta a derecho y que se ejecutó con “absoluta arbitrariedad”. Todo un mazazo y una afirmación que causa bochorno y sonrojo al tratarse de una administración pública. A partir de ahí, y con la simbólica coincidencia, el equipo popular debería tomar buena nota. En lugar de cerrarse en banda y correr hacia adelante como la fábula del burro y la zanahoria, debe aprovechar esta semana para meditar, reflexionar y asumir que, sin rectificación y sin readmisión de los 260 empleados afectados, lo que le queda hasta el final de la legislatura será un auténtico Vía-Crucis.

La señora Pelayo tenía el ERE del Ayuntamiento como desgraciado proyecto estrella de esta legislatura. Su supuesta entrada triunfal en Jerez pretendía ganarse a la opinión pública a base de derramar, laboralmente hablando, la sangre de cientos de honrados profesionales que ella quiso machacar firmando una orden cual Herodes. Y se ha demostrado que todo se hizo por sed de venganza porque ni siquiera ha logrado ahorrar dinero o estabilizar la situación catastrófica que vive el Ayuntamiento y nuestros servicios públicos más esenciales. Sólo un dato: hoy la nómina, pese a los despidos, es más costosa para usted que hace un año. Pese a todo, la vida es generosa y a la que podría ser considerada como nueva Judas de la política, pues traicionó sin contemplaciones a sus trabajadores tras prometerles un año antes en campaña y cuando estaba en la oposición que jamás dejaría a nadie “tirado en una cuneta”, le ha brindado una segunda oportunidad.

Si reflexiona profundamente y decide lo más coherente, lógico y más beneficioso para el interés general, como es sin duda alguna la readmisión de los 260 trabajadores afectados, recuperará la senda de la cordura y saldrá del duro aislamiento actual. Si no aprovecha esta semana tan especial para los cristianos y creyentes, y para tantísimas otras personas, habremos perdido un año en vano, la ciudad seguirá hundida y ni tan siquiera habrá tenido la sensación de haber purgado sus más graves pecados capitales: la soberbia y la ira. Medite señora Pelayo, reflexionen señores del PP. Abandonen el camino de la persecución y las mentiras, de la saña y la cobardía, y resuciten ahora que es el tiempo más apropiado para ello. Resuciten todas aquellas buenas palabras que pronunciaron ante un pueblo, y unos trabajadores, que sigue expectantes por ver qué en qué queda tantas y tantas cosas como se les prometieron. Nunca será tarde.

Ante el nuevo episodio de inundaciones en el entorno del Río Guadalete, Ecologistas en Acción Jerez recuerda que las crecidas de los ríos son un fenómeno natural y que el problema está relacionado con la ocupación de las riberas y de las zonas inundables y la falta de control de las administraciones. El colectivo considera que la prevención es la mejor manera de evitar el problema, para lo cual es necesario proteger y ordenar la llanura del río Guadalete y garantizar el régimen de caudales ecológicos. Sin que ello suponga la realización de grandes obras de infraestructuras.

El Guadalete se ha vuelto a desbordar en la zona rural de Jerez, y de nuevo un fenómeno natural recurrente como son las crecidas de los ríos, se convierte en un problema social por la afección de estas a viviendas, infraestructuras y cultivos que se han desarrollado en los últimos lustros junto a las riberas y la llanura de inundación del río.

Ecologistas en Acción Jerez considera que el problema no está en la crecida del río en sí o en la gestión de los desembalses sino en la ocupación de las riberas y llanura del río, la falta de ordenación de las zonas inundables y el escaso control urbanístico de este espacio.

Igualmente, el colectivo recuerda que estudios recientes realizados por la Administración y la Universidad han puesto de manifiesto que uno de los principales problemas que tiene el río es la pérdida de capacidad hidráulica por el aporte extraordinario de sedimentos en el cauce. Estos sedimentos provienen en su mayor parte de las laderas puestas en cultivo en el tramo bajo de la cuenca del Guadalete y su llegada al cauce se ha favorecido por las prácticas agrarias intensivas, la roturación de laderas y la deforestación de márgenes de cauces y vaguadas.

El colectivo quiere reseñar que las avenidas ordinarias del río tienen múltiples funciones positivas, como el mantenimiento del cauce, la remoción de sedimentos, la conservación del bosque de ribera o la fertilización de las vegas. Sin embargo, la eliminación de las avenidas para acumular agua en los embalses con las que abastecer al regadío y las poblaciones, ha favorecido la acumulación de sedimentos, la progresión de vegetación en el interior del cauce y la ocupación de las riberas, y en definitiva, la pérdida de capacidad del río para evacuar las crecidas.

Frente a quienes plantean que para evitar las inundaciones hay que dragar el río, hacer obras de defensa, encauzamientos, canalizaciones o construir más presas, Ecologistas en Acción Jerez considera que las alternativas para minimizar el problema pasan por proteger la llanura de inundación y las riberas, cambiar las prácticas agrarias y recuperar el régimen de caudales ecológicos. El propio río, a través de los caudales de mantenimiento que se pueden desembalsar anualmente, es la mejor herramienta para recuperar la capacidad de desagüe de avenidas y la propia ribera.

Ecologistas en Acción Jerez manifiesta que de no hacerse un cambio en el modelo de uso y gestión del agua y la llanura de inundación del río Guadalete, el problema se seguirá reproduciendo de forma recurrente.

Son muchos los males que tiene el Xerez Club Deportivo. Problemas en todos los frentes que hacen dejar al descubierto la debilidad actual por la que atraviesa la entidad azulina. No quiero aburrir con el asunto institucional, porque con tantas deudas, el pago inminente a Hacienda que hay que realizar, entre otras cosas, o la nómina impagada a los futbolistas, el tema se podría alargar. Leer noticia completa

El Xerez continúa sin levantar cabeza. Ya son ocho partidos sin ganar y la segunda vuelta está, valga la redundancia, a la vuelta de la esquina. Lo preocupante es que en Chapín el equipo continúa dando una imagen pobre y no termina de enganchar al aficionado. Es triste comprobar cómo en lo que llevamos de temporada no se ha logrado superar en asistencia al estadio ni siquiera el número de abonados; es decir, que ni los que se han gastado los jurdeles en adquirir el carnet van al municipal. Ante el Huesca me sorprendí al comprobar que aquellos que asistimos al empate ante el conjunto dirigido por D’Alessandro no llegábamos ni a cuatro mil. Más de tres mil abonados se quedaron en casa y lo escucharon por la radio, y algunos, ni eso. Podemos poner mil excusas, como el clima, el horario o el día elegido, pero lo cierto es que a Chapín no acuden los aficionados porque el juego del equipo no seduce a nadie. Es tedioso.

Pero esta ausencia de público no hace si no jugar en contra de los intereses del equipo. El aspecto del estadio es desolador. El ambiente es gélido. Apenas llega el empuje de la afición a los jugadores, tan necesario cuando la situación pinta mal. Todo esto se incrementa con la inestimable ayuda de las pistas de atletismo, utilizadas dos veces al año. El equipo visitante prácticamente juega como local y el árbitro pita más tranquilo en Chapín que en un partido de solteros contra casados de su  barrio. No hay presión ninguna y el factor campo no existe. Todo esto me hace llegar a una conclusión: Si acuden tan pocas personas al estadio, ¿por qué el Xerez no juega en La Juventud? 

Si le preguntásemos a los aficionados muchos de ellos apoyarían el retorno al estadio de El Chicle. ¿Cuántos? No lo sé. Por eso desde aquí abogo por un referéndum azulino, ¡ya! El club debería hacer una consulta entre los abonados. ¿Prefieren acudir seis mil personas a un estadio desangelado donde caben veintiún mil o acudir a lo que sería una olla a presión por su menor capacidad y cercanía de las gradas al campo como La Juventud? Recuerdo la temporada 2001-2002 donde, tras pasar por El Palmar y La Juventud, dos estadios pequeños pero próximos al césped, el Xerez se jugó el ascenso a Primera División en la última jornada ante el Recre. Los azulinos acabaron cuartos, sólo por detrás de Atlético, Rácing y Recre. La segunda temporada, más de lo mismo. Se mantuvo la ilusión hasta que Gil Silgado se cargó a Schuster y aún así el equipo acabó sexto. En ambas campañas, según el nuevo modelo de competición, el Xerez habría entrado en la promoción. Quizás ahí tengan una solución a corto plazo.

No entiendo cómo el Jerez Industrial quiere, una y otra vez, jugar en Chapín si luego sólo acuden quinientos aficionados a ver el partido. ¿De verdad les compensa? Si de mi dependiera, les cambiaría el estadio sin dudarlo. Es más, el partido ante el Almería lo jugaría ya allí. Lo dicho, referéndum azulino ¡YA!

El primer lunes de este año va a ser martes. Este 7 de enero todos, en mayor o menor medida, volvemos a la normalidad: a los horarios regulados de sueño y comidas, al trabajo,… La rutina vuelve a instalarse ya en nuestras vidas hasta prácticamente el verano, con las esperadas interrupciones de la Semana Santa y la Feria.

Aunque comentemos con los familiares y amigos que ya se acabó lo bueno, lo cierto es que muchos de nosotros ya teníamos ganas de recuperar ciertos hábitos, que por eso dicen aquello de que el hombre es un animal de costumbres. De un día para otro, los adornos navideños, el Nacimiento, los polvorones y las cajas de regalos desaparecen del salón y, por desgracia, algún que otro abeto acaba  paliducho junto a los bombos de basura de cualquier barrio (por cierto, se deben llevar a los viveros municipales para que los replanten y no abandonarlos así).

Nunca se cansa una de ver a los familiares y amigos que están lejos y que vuelven a casa como el turrón, pero sí que terminan haciendo estragos las comilonas y los trasnoches, por ejemplo. Puede parecer increíble, lo reconozco, pero mi estómago echa de menos el jamón de york y la lechuga. El ciclo anual comienza de nuevo y ahora es tiempo de apuntarse al gimnasio otra vez, de intentar dejar de fumar y de estudiar inglés un par de días, hasta que se nos olviden los buenos propósitos. Enero es como septiembre, un mes de metas y buenas intenciones. Otra cosa es dónde queden en unas semanas…

Ni ahora somos tan buenos ni antes tan malos. Eso es lo que pienso del Xerez de Esteban Vigo de esta temporada. Las últimas tres victorias consecutivas han supuesto un verdadero balón de oxígeno para una plantilla que estaba sobre el alambre. Pero tampoco podemos lanzar ya las campanas al vuelo. La parroquia xerecista tiende a recuperar con mucha facilidad la ilusión, pero tan rápido nos levantamos que el mareo vuelve a tumbarnos. Esto es muy largo, acabamos de igualar la balanza de victorias y derrotas en Liga, y ahora espero que el equipo vaya creciendo al igual que el número en el casillero de partidos ganados sobre los perdidos. Es cierto que me gusta mucho más ver al Deportivo a dos puntos de la zona de ‘play off’ de ascenso a Primera División que coqueteando con el descenso y su desaparición. Pero al igual que el entrenador malagueño, no estoy tranquilo, queda mucha Liga.

Una sensación de alivio ofrece que los futbolistas que han estado sustituyendo a los lesionados o sancionados estén dando más que la cara. El equipo parece que va a más, pero al igual que se encadenó tres derrotas consecutivas y ahora otras tantas victorias, el Xerez no debe caer en la relajación. Cinco partidos sumando de forma seguida es un síntoma para soñar, aunque los puntos se han sacado ante rivales de ‘nuestra Liga’, esa al menos en la que este tiempo atrás hemos estado metidos para evitar caer en descenso. El sábado llega una buena prueba de fuego para calibrar lo que puede dar o no el equipo de Esteban. Es el momento de desequilibrar la balanza en positivo. Para recibir a un Elche en horas bajas a domicilio, aunque líder en solitario de la categoría, los azulinos llegan con la moral al 100 por cien, recuperando efectivos y con una afición que se volverá a entregar tras la última goleada al Hércules por 1-5. La balanza está igualada, ahora solo queda que el peso que le ponga el equipo sea el positivo, el que nos lleve hacia los puestos que nos hagan de nuevo soñar.

Dice el tópico que la afición del Atlético de Madrid es la más sufridora de España. Me río yo de los colchoneros al lado de todo lo que ha aguantado y aún continúa aguantando, tanto deportiva como institucionalmente, los parroquianos del Xerez Club Deportivo. Pisoteada hasta la extenuación por aquellos que mal dirigen su club, saben responder a su equipo a poco que éste demuestre un mínimo de interés y amor propio por jugar al fútbol. Después del varapalo, otro más en casa, sufrido ante el Murcia y de despedir a los jugadores a gritos y silbidos, el empate ante el Racing se vio de otra manera. El hecho que el equipo no bajara los brazos ante el tempranero gol de los cántabros ya era noticia. Se logró remontar con un nuevo gol de Maldonado, ojala le sirva para tomar confianza.

La presencia y el buen hacer de Keita en el centro del campo otorgó de solidez a la medular, además el malí se metió a los poco más de 5000 aficionados en el bolsillo con su lucha constante. La sensación que pude percibir de los xerecistas al salir de Chapín fue que al equipo “se le había visto otra cosita”. Lo que yo os diga, una afición muy agradecida a poco que le den, porque poco se le vio al Xerez. Si realmente no quiere pasar apuros de nada sirve ir sumando de uno en uno. Después de los dos empates consecutivos, los de Esteban Vigo han de dar ya un golpe sobre la mesa y comenzar a sumar de tres en tres puntos. Es imprescindible ganar ante la Ponferradina, por lo civil o lo criminal. Lograr tres puntos se vuelve clave si se quiere empezar a hacer “algo” esta temporada. Empecemos por alejarnos cuanto antes de los puestos de descenso. Ya no valen más excusas. Las expresiones “Esto sólo acaba de empezar” y “Queda mucha liga” no tienen sentido cuando se ha consumido un cuarto de temporada. Debe haber una reacción y ha de ser inmediata si no queremos empezar a pasar apuros.

Realmente, creo que Esteban puede hacer grandes cosas con este grupo si el viento sopla a favor pero considero que le va a resultar tremendamente complicado sacarlos adelante si se cae en descenso, por mucho que al míster no le preocupe si ocurre dicha situación. Para evitar esto es imprescindible que la mejoría se plasme cuanto antes y el primer golpe ha de ser en la mesa de la Ponferradina.

En un arranque irregular de la temporada en el seno del Xerez se necesitaba ya una alegría. Problemas de resultados, de lesiones graves y de sentimientos encontrados de la afición hacia la parte institucional. Muchas cosas negativas en el ambiente y pocas positivas. Pero poco a poco todo parece que va a ir cambiando.

Centrándonos en lo deportivo, Esteban Vigo y el Xerez han encontrado la dosis de oxígeno que necesitaban. El nuevo pulmón azulino se llama Sidi Keita. Muy esperado por la afición, en sus primeros minutos esta temporada en Chapín el malí no defraudó. Rindió el tiempo que esperaba su entrenador y abandonó el campo aclamado por la parroquia xerecista. Como en sus mejores minutos cuando llegó al Xerez por primera vez para jugar en Primera, Keita sabe que está llamado a ser uno de los hombres importantes en su equipo. Tras los muchos sinsabores, el futbolista de color se ha convertido en un nuevo ídolo. Representa la esperanza, el hombre que oxigene al equipo, un pulmón incansable capaz de sacar lo mejor del cuadro de Esteban Vigo. La confianza de todos ya la tiene el africano, ahora deberá rugir para que el Xerez comience a levantar el vuelo. La suerte de Sidi, será la suerte de todos los xerecistas y el equipo. Un nuevo pulmón llega recuperado y ahora con mucho margen de mejora. !!!!Ánimo y a ganar¡¡¡¡

Las cosas no han empezado nada bien en lo deportivo para el Xerez. Tras ocho jornadas de Liga el equipo está a solo un punto del descenso a Segunda B, con dos victorias, un empate y cinco derrotas. Ahora regresan de nuevo a Chapín, ante su público y la reacción no debe hacerse esperar.

Se trata de una motivación para los de Esteban Vigo que se enfrentarán a un Racing de Santander necesitado de puntos y que también llega con problemas. Pero sin duda, la mayor motivación con la que saldrán los azulinos al campo será la de conseguir tres nuevos puntos para dedicárselo a Rafa García. Después del palo recibido a principios de semana, tras conocerse que se le había detectado una anomalía cardíaca al madrileño, el mejor homenaje posible sería brindarle el triunfo. Al igual que hicieran en Guadalajara con Ruz, sus compañeros saldrán al verde de Chapín con camisetas de apoyo a Rafa García. El equipo debe remontar el vuelo ya y qué mejor que hacerlo en este momento, con la motivación que supone animar a otros compañeros que, de momento, no estarán sobre el campo. Los jugadores, la afición y el club ya lo necesitan. Mucha dosis de motivación este fin de semana para ganar al Racing de Santander. Ojalá que sea un buen homenaje para Ruz y Rafa García.