El Hércules quiere sacar renta de su próxima visita al Municipal de Chapín. El conjunto alicantino parecía carne de Segunda División B hace una vuelta y ahora se encuentra con la posibilidad de salir de los puestos de descenso si logra la victoria ante el Xerez este próximo domingo y el Mirandés no gana.
Tras cuatro jornadas consecutivas sin perder en la que los alicantinos han sumado ocho de doce puntos, el Hércules ha marcado la remontada de la categoría, aunque al duelo de Chapín va a llegar con ausencias considerables. En el encuentro de ayer disputado en el Rico Pérez ante la Ponferradina, los herculanos sufrieron las expulsiones de Paco Peña y Mario Rosas.

El centrocampista malagueño acabó el partido antes de tiempo por doble amarilla, mientras que el capitán fue expulsado con roja directa por golpear a un contrario. Aún así, el Hércules tiene la intención de recurrir la tarjeta roja que vio Peña porque, aunque en el acta no se habla de agresión sino de “codazo en la cara con uso de fuerza excesiva”, según el defensa no le dio al jugador de la Ponferradina en el rostro.

“Fue más un forcejeo que otra cosa. Por mis ganas de ir a por la pelota, pude poner algo más de fuerza y ser más agresivo pero ya está y a ello se le une que el rival exagera más de la cuenta. Todo eso ayuda a un cuerpo arbitral que no estuvo a la altura del partido”, manifestó Peña, quien añadió: “Lo único que pido es que en las diez últimas jornadas no nos vuelva a pitar, por el bien del Hércules”.