San Juan de Ávila ha vuelto a Jerez cuatro siglos y medio después de la labor evangelizadora que lo trajo en vida. Sus reliquias han llegado a la parroquia que lleva su nombre. En este templo del arciprestazgo norte de la ciudad inicia seis días de veneración a quien, desde el 7 de octubre pasado, es doctor de la Iglesia y que, en pleno Año Jubilar en su honor, visita una tierra en la que ya estuvo a mediados del siglo XVI en el marco de su apostolado por toda Andalucía.

El Santísimo, expuesto a la adoración de los feligreses, lo ha recibido en la iglesia parroquial en la que ha sido recordado que, quien además es patrón del clero español, creó en su día un colegio en Jerez. Hoy en día encuentra que el Seminario Diocesano, impulsor de esta presencia de las reliquias, lleva su nombre. Toda la jornada de mañana domingo estará expuesto en la sede de esta institución (Compañía de María), tras ser trasladado a las 12 horas desde la Casa Sacerdotal San Bruno (junto a la capilla del Calvario).

Tras un saludo inicial de bienvenida por el sacerdote Antonio Diosdado, párroco de San Juan de Ávila, el rector del Seminario Diocesano, Ignacio Gaztelu, ha tenido a su cargo una intervención ante los fieles que ha permitido iniciar la invitación a la oración que supone la presencia de estas reliquias y para la que han sido seleccionados para cada uno de los seis días previstos, una serie de escritos del Santo. Para esta primera jornada ha sido escogido, por ser sábado, uno relativo a María Santísima.

Un colaborador de la Basílica de San Juan de Ávila en la cordobesa Montilla, donde falleció en 1569 y donde reposan sus restos tan visitados durante el presente Año Jubilar, ha ofrecido una tercera y última intervención en la que han sido recordados sus trazos biográficos fundamentales y entre los que se cuenta su intervención en las conversiones de posteriores nuevos santos en los casos de San Francisco de Borja y San Juan de Dios. La labor de la dirección espiritual o la creación del catecismo se deben a él.

Una celebración de la Eucaristía en la misma parroquia de San Juan de Ávila y un acto de oración juvenil en el cercano Colegio de Montealto completan la primera jornada. Este domingo, a las 20.00 horas, será monseñor José Mazuelos Pérez, obispo diocesano, quien tendrá a su cargo la misa con la que se completará la jornada prevista en el Seminario Diocesano. Las intenciones de Benedicto XVI y el sucesor que estando las reliquias en Jerez comenzará a elegirse en Roma se suman a las de los fieles en estas celebraciones.

LA ESCENA

Lo más llamativo del relicario bendecido en agosto de 2011, concebido por el escultor Antonio Bernal y realizado por el orfebre Manuel Valera, es la escena que representa al Santo enseñando a un grupo de tres sacerdotes jóvenes en el patio de su casa de Montilla, reproducido con tanto detalle que no faltan la parra o el pozo. Un corazón de plata en la parte superior sirve de estuche con la reliquia de su corazón, del que salen resplandores de gloria. Está coronado por un arca de plata, réplica del que en Montilla contiene su cuerpo.

El programa de su presencia en la Diócesis de Asidonia-Jerez ofrece las reliquias a la veneración en el Seminario mañana domingo y mañana del lunes, en Ubrique y en El Bosque en la tarde del lunes, en El Puerto de Santa María y Sanlúcar de Barrameda en la mañana y la tarde del martes respectivamente, en La Cartuja y la parroquia jerezana de Santa María Madre de la Iglesia el miércoles, en el convento de Religiosas Mínimas el jueves y tanto en este cenobio como en la parroquia de San Marcos el viernes.

El obispo de Asidonia-Jerez, José Mazuelos, ha hecho público el siguiente comunicado sobre la renuncia de Benedicto XVI:

“El anuncio de la renuncia de Benedicto XVI al ministerio del Obispo de Roma por razones vinculadas a su avanzada edad ha sido recibido en la Diócesis de Asidonia-Jerez, a cuyo cargo me puso por la gracia de Dios, con un sentimiento de gratitud al Señor por habernos regalado su magisterio y pastoreo que, con fidelidad al Evangelio y capacidad de diálogo con la sociedad, nos ha guiado durante los últimos ocho años.

El Derecho Canónico contempla la posibilidad de este tipo de determinaciones del Santo Padre, aunque hayan sido poco habituales a lo largo de la Historia. A pesar de todo la Iglesia puede congratularse de tener un Obispo de Roma de la talla de Benedicto XVI, que enarbola la grandeza de quien, encontrando alguna limitación a la gran capacidad demostrada durante los años de su pontificado, decide generosamente renunciar al ministerio por amor y humildad, creyendo en ello un beneficio para el Pueblo de Dios

Encomendamos al Señor esta nueva etapa que comenzará una vez se haga efectiva esta renuncia el próximo 28 de febrero. Sus enseñanzas nos seguirán acompañando y aportando luz en medio de un mundo que necesita, como bien ha enseñado durante su Pontificado, ser iluminado por la fuerza de la razón, de la verdad y de la fe.

Que todos los sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos, seminaristas y laicos de Asidonia-Jerez pidan en sus oraciones a Jesucristo, por la persona del Papa Benedicto XVI y por la de su augusto Sucesor”.

La asamblea de fieles que llenó la Santa Iglesia Catedral ha constituido un espléndido signo de comunión eclesial y diocesana en torno al obispo, que oficiaba la celebración de la Eucaristía convocada para iniciar formalmente el nuevo curso pastoral.  La misa, concelebrada por un buen número de sacerdotes y con la presencia de representantes de la práctica totalidad de las líneas de trabajo pastoral de Asidonia-Jerez, movimientos, comunidades, parroquias y demás ejemplos de la fe vivida comunitariamente, contó con los cantos del Coro Juvenil Diocesano. En ese marco tan evocador de una feligresía viva y deseosa de vivir un nuevo año provechoso, monseñor José Mazuelos no pudo, para iniciar su homilía, sino señalar con una indisimulada alegría y contundencia en sus palabras a los participantes en la celebración que “vosotros sois la riqueza de la Diócesis”.

Tres citas inmediatas en la agenda de la Iglesia universal han sido destacadas por el pastor como ejes importantes en el trabajo: la declaración para San Juan de Ávila como Doctor de la Iglesia el próximo domingo 7 de octubre, el Año de la Fe que tendrá lugar el día 11 del mismo mes y el Sínodo para la Nueva Evangelización que tendrá lugar entre el 7 y el 22.  Son los centros de atención para un curso en el que pronto se comenzará a trabajar a nivel de Consejo Pastoral en la profundización a la que serán invitadas todas las instancias eclesiales.