El Pleno del Ayuntamiento de Jerez se reúne este viernes 2 de agosto en sesión extraordinaria para abordar la aprobación del nuevo estatuto jurídico de las Entidades Locales Autónomas, un documento que, según aseguran algunos alcaldes pedáneos, “llega tarde”. No obstante, la valoración general es positiva aunque aún quedan muchos aspectos por pulir ya que será en la negociación de los convenios específicos con cada pedanía donde “habrá pelea”. Como es de preveer, el estatuto saldrá adelante aunque solo sea con la mayoría absoluta de los populares.

La sensación es que poner las competencias y el modelo de financiación de los pueblos negro sobre blanco “hacía falta desde hace tiempo”. Algunos de los siete alcaldes pedáneos de Jerez ya están estudiando de qué competencias quieren hacerse cargo. Es el caso, por ejemplo, del responsable de El Torno, Miguel Morales, que asegura que “el que mejor va a prestar un servicio a los vecinos es la pedanía”. Cita el caso de la limpieza ya que “hay barrios en la ciudad que dan pena”. Morales está dispuesto a hacerse cargo de “las competencias que la ley me permita y que el Ayuntamiento quiera cederme”. Todo eso, claro está, con la idea de que la pedanía incremente sus ingresos. “Sería positivo porque se beneficiarían los desempleados de El Torno”, asegura.

En San Isidro del Guadalete también estudian ya qué competencias podrían prestar aunque su alcalde, Antonio Ramos, mantiene cierto escepticismo: “Hasta que no lo vea, no lo creo”, dice. El principal obstáculo para el desarrollo del estatuto es, a su juicio, la aplicación de la nueva reforma de la administración local aprobada hace solamente unos días por el gobierno central, que “es un atentado para los ayuntamientos pequeños”. Expectación también hay en Estella del Marqués, donde Blas Moreno también cree que “hacía falta que se regulara ya”.

El punto clave: la financiación

Como es lógico, el quid de la cuestión es la fórmula de financiación. Según el convenio marco, serán las ELAs las que decidan qué sistema seguir entre algunas propuestas. Entre ellas están la de recibir una asignación fija o bien adscribirse a las participaciones de ingresos municipales y autonómicos.  En San Isidro, por ejemplo, califican esta opción como “interesante”.

Si en cualquier otra circunstancia la financiación es importante, más aún lo es en la actual situación de crisis económica. La deuda que arrastra el Ayuntamiento matriz con las pedanías supera varios millones de euros. En el caso de las deudas más modestas, la cifra alcanza los 500.000 euros.