El IES Fernando Savater celebró la pasada semana el X Aniversario del centro. En el festejo esuvieron presentes la alcaldesa, María José García-Pelayo, acompañada del primer teniente de alcalde, Antonio Saldaña, el segundo teniente de alcalde, Javier Durá, y la delegada de Educación y Juventud, Lidia Menacho.

La primera edil transmitió a los presentes su felicitación por este aniversario: “Estáis celebrando esta efemérides como una familia, pensando en los que están y en los que ya están fuera del centro educativo. Además, el mensaje que estáis trasladando para cuidar los valores y los principios es digno de felicitación”, y añadió que “sois el instituto más joven de la ciudad, y esa juventud os da un plus de energía, de vitalidad y de ganas de trabajar. Creo que llegar a vuestro décimo aniversario, celebrando la consecución, por fin, del Bachillerato que tanto habéis reivindicado, es buena prueba de ello”.

La alcaldesa declaró que “este centro inició una batalla encaminada a ampliar su oferta educativa, batalla en la que estuvieron con vosotros la actual delegada de Educación, Lidia Menacho, y el segundo teniente de alcalde, Javier Durá, y lo habéis conseguido” y ha puntualizado “cuando se trabaja de la mano, se obtienen los frutos”.

García-Pelayo deseó a la comunidad educativa “una segunda década de existencia con nuevos retos y nuevos proyectos” y se puso a disposición del centro “para colaborar en vuestras inquietudes y en un proyecto educativo serio y riguroso como el vuestro a través de la Delegación de Educación, que está a vuestra disposición para articular vuestras peticiones, y para gestionarlas en caso de ser necesario ante las administraciones competentes”.

La alcaldesa recordó que “desde este Ayuntamiento, estamos trabajando para que Jerez sea, cada día más, una Ciudad Universitaria, y para que podáis encontrar en el Campus de Jerez una oferta formativa que cumpla en la medida de lo posible las expectativas de la mayoría de vosotros”.

También pidió a los estudiantes que “en un momento de especiales dificultades, y contra las dificultades, la educación y el estudio debe ser vuestra prioridad porque una ciudadanía formada es una ciudadanía fuerte, con un espíritu luchador, y tendrá más fácil su integración laboral”. Les ha recordado además que “el futuro de Jerez está en vuestras manos, y aunque el camino no va a ser sencillo, sin duda es emocionante”.

Más de 16.000 alumnos de Secundaria, Ciclos Formativos y Bachillerato vuelven a sentarse en los pupitres. La normalidad ha sido la tónica dominante pero el regreso a las clases es más especial en dos centros de la ciudad: los IES Fernando Savater y Fernando Quiñones, que estrenan Bachillerato.

Tras una década de solicitudes y protestas, 70 alumnos cursan ya sus estudios postobligatorios en el instituto de la avenida Nazaret. En el centro, el ambiente de alegría por la nueva oferta es evidente aunque los recortes en el sector han empañado la satisfacción completa. Ahora son ya casi 600 los estudiantes de este instituto que comienzan su undécimo curso escolar. Les ha costado trabajo conseguirlo pero lo han hecho a lo grande: es el único instituto de Jerez con Bachillerato bilingüe. “Era una pena que los niños que hacían ESO bilingüe no pudieran seguir también en Bachillerato”, asegura el director del centro, Eugenio Oliva. Son varias las asignaturas que estudian directamente en inglés lo que proporciona a los alumnos conocimientos suficientes para conseguir títulos oficiales de idiomas como el B1 y el Trinity. Además de esta opción, los estudiantes han podido elegir entre las ramas de Ciencias de la Salud y Humanidades y Ciencias Sociales.

Docentes y alumnos valoran especialmente poder continuar otro nivel más entre caras y aulas conocidas, sin tener que adaptarse de nuevo a otro instituto para tan solo dos cursos. “Estoy muy contento por volver a clase en el que fue mi instituto”, asegura José Antonio Pérez, de 20 años, que tras interrumpir sus estudios a los 16 años ha decidido cursar el Bachillerato. Lo mismo piensa Alba Hiniesta, muy ilusionada por estar de nuevo estudiando “con mis profesores de siempre”. Solo han estado unas horas en clase pero para Francisco Javier Nieto todo parece ir sobre ruedas: “Hay que ponerse las pilas para volver a estudiar pero la verdad es que me lo esperaba más difícil”, asegura este estudiante de 19 años que también se reengancha al sistema.

Los recortes, también presentes

Como en todos los centros andaluces, el IES Fernando Savater también se ha visto afectado por los recortes. Con 78 alumnos más en sus aulas, solo disponen de un docente más que el año pasado cuando lo necesario son cuatro. Por eso no es de extrañar que haya profesores con las camisetas reivindicativas de la enseñanza pública en los pasillos. De media, la ratio está en 30 alumnos aunque hay clases en las que llegan a 34.

Llega septiembre y los alumnos más pequeños (de 0 a 3 años) son los primeros en incorporarse a clase. Lo hará en la mañana de hoy en las escuelas infantiles (públicas) y centros de educación infantil (guarderías conveniadas con la Junta de Andalucía) aunque será de forma paulatina para ir acostumbrando a los niños a las rutinas escolares.

Justo dentro de una semana volverán a los pupitres los alumnos de Primaria y el día 17 se cerrará el círculo con los de Secundaria y Bachillerato. Precisamente, en este último nivel, una de las novedades más importantes de este año es la puesta en marcha del ciclo postobligatorio en dos institutos de la ciudad: el IES Fernando Savater y el IES Fernando Quiñones.

El primero de ellos ha celebrado especialmente la concesión de este nivel, ya que llevaba prácticamente diez años reclamando su implantación en el centro. En este caso, los alumnos se han podido matricular de las vías de Bachillerato de Ciencias y Tecnología y de Humanidades y Ciencias Sociales. La principal satisfacción del equipo docente y de los padres implicados en esta lucha desde hace años es la de poder continuar su programa desde 1º de ESO hasta que los estudiantes se marchan a la Universidad.

La situación de los dos centros es diferente ya que en el instituto de la avenida Nazaret hay espacio suficiente para la incorporación del nuevo nivel mientras que en el Fernando Quiñones ya tuvieron el año pasado que colocar aulas prefabricadas para absorber la creciente demanda de alumnos de la zona este.