Sergio Barroso quiso dar su valoración del partido de ayer y apuntaba que “estamos contentos por varios motivos pero no por ello todo es color de rosa y debemos caer en la auto-complacencia. Hay muchas cosas que podemos y debemos hacer mejor. No podemos cometer el error que muchos clubes cometen en ser extremistas. Que cuándo se gana somos El Pozo Murcia y todos somos perfectos; y cuándo se pierde, son la Peña La Bufanda y se autodestruyen”.

“Estamos contentos por haber podido disfrutar del ambiente que se vivió en el pabellón y en los días previos. Ahora está en manos de los dos clubes, tener el compromiso de hacer cosas buenas que permitan darle continuidad a esta ola”, reconoce Barroso, quien añade que “esta victoria es para nosotros es muy importante, no por ser un duelo directo con un equipo favorito, sino por cuestiones intrínsecas de nuestro grupo deportivo. Aunque pueda parecer desapercibido, refuerza nuestro modelo en el cual creemos que el club y las personas que trabajan desinteresadamente en él, están por encima de egos individuales. Por supuesto que estamos encantados con el comportamiento, implicación y rendimiento de nuestros jugadores”.

El técnico xerecista no quiere caer en triunfalismos y recuerda que “no podemos pensar que hacemos todo bien ni mucho menos. Hay muchas situaciones que aún no controlamos y patrones de conducta deportiva que se repiten, aún entendiendo que en un derbi los nervios están a flor de piel. Por ejemplo tuvimos demasiados ataques poco elaborados y que en dos o tres pases nos veíamos obligados a profundizar por falta de soluciones al balón”, matizando que “no corrimos las transiciones ofensivas como solemos hacer salvo en muchos minutos de la segunda parte y eso provocó que jugásemos a un ritmo que quizás le venía mejor al equipo rival. Mientras que en defensa, nos costó ajustar nuestros conceptos colectivos y eso provocó que defendiéramos muy individualmente y nos cargáramos de faltas hasta el punto de disputar los últimos 14 minutos con el bonus de las 5 faltas y vernos obligados a bajar la presión al balón. Es un fallo importante que te condiciona en defensa y suele costar puntos.”

Sergio no quiso dejar pasar la oportunidad para agradecer “el trato que se nos proporcionó antes, durante y después, la gran mayoría de los jugadores amigos rivales; así como su cuadro técnico Nene, Victor y Álvaro.”