El Xerez afronta en la presente semana dos finales consecutivas. El conjunto azulino, a nueve puntos de la permanencia, pero con un partido menos, recibe al Cabecense e la jornada de hoy (Guadalcacín, 12 horas) y al Pozoblanco en las jornada de Domingo de Resurrección, y lo hará con muchas bajas.
A las ausencias ya sabidas de Sousa y Figueroa por lesión hasta final de temporada, Higuera no podrá contar con Morlán, sancionado, ni con Todor, a la espera de su pasaporte para volver a su país y cerrar su visado para intentar debutar con la camisola azulina.
Para colmo de males, Higuera va a tener las bajas de Kevin y Nico, que no han entrenado durante la semana, así como la duda hasta última hora de Lucas Teixeira. El defensor brasileño se lesionó hace un mes aproximadamente de su tobillo y a día de hoy sigue sin recuperarse, lo que supone un problema más para Higuera, aunque está citado para la final ante el cuadro sevillano.
De esta manera, el técnico extremeño del Xerez CD va a tener que tirar una semana más de jugadores del equipo juvenil, que este pasado domingo acabaron la temporada. A los ya habituales Heredia, Jesús, Javi, David y Rubén, Higuera está pendiente del central Juan Mateos, lesionado en el encuentro ante el Ceuta.
Una nueva final para un Xerez que no puede fallar. Todo lo que no sea una victoria sería ya un golpe demasiado duro para una plantilla joven, sin experiencia y que está pagando los platos de una mala planificación dentro de una entidad que en la mañana de hoy puede dar un paso más hacia el descenso a Primera Andaluza.