Se habla de salir a correr como perros, jugarse la vida, tener confianza, trabajar duro, reuniones, conversaciones, ratificaciones… Pero la realidad es otra y se acaba en solo 8 minutos. Eso fue lo que necesitó el Numancia para matar un partido, ocho minutos, dos jugadas, y dejar al Xerez con ganas de pedir el final. El Xerez cayó derrotado por 3 a 0 en Los Pajaritos y sin excusas, ninguna, ni clima ni nada, porque el Numancia hizo lo que tuvo que hacer, ir a por el partido después de cinco jornadas sin ganar. Leer noticia completa