La hermandad del Consuelo vivió en la noche del sábado uno de esos instantes que se quedarán, para siempre, guardados en la propia historia de la cofradía. El Señor del Consuelo, por primera vez, presidía el que será su paso de misterio en un futuro cada vez más cercano. Futuro que se hará presente cuando los cofrades del Pelirón puedan presentar el paso de palio en el que ya trabajan para María Santísima del Consuelo, la que ahora realiza su estación de penitencia con la cruz detrás de su manto.No tuvo la hermandad reparos en mostrar su satisfacción al ver el resultado final del ejercicio piadoso, que se desarrolló en las mismas condiciones que en años anteriores, salvo por el importante detalle de que el Señor del Amparo presidía, amparado en el ‘Año de la Fe’, el paso de misterio de la corporación. Y el conjunto resulta brillante, rotundo, estéticamente impecable, y así lo reconocieron los cofrades que se acercaron a la capilla del Consuelo a ver este ejercicio cultual.

Es tiempo, por tanto, de soñar por el Pelirón. De pensar en un crecimiento exponencial de la cofradía, gracias a un nazareno que lleva años a la sombra de la Virgen del Consuelo, y que súbitamente ha iluminado la fría noche del primer sábado de cuaresma. Es tiempo de crecer, y de aspirar a cotas mayores, porque mimbres hay para hacerlo. Y es tiempo también de disfrutar del trabajo realizado y de devolver al Pelirón todo el cariño que este barrio le da a su cofradía. Será el próximo Miércoles Santo…