En medio de tantas noticias crudas y catastrofistas, la delegada municipal de Bienestar Social ha transmitido un soplo de aire fresco sobre el panorama local con el anuncio de una reducción notable tanto de casos como de intervenciones en el ámbito de la violencia de género. En concreto, Isabel Paredes ha mencionado una bajada del 16% en actuaciones de su Delegación en esta materia, destacando el hecho de que las órdenes de alejamiento se hayan reducido en casi la mitad. Así, si a fecha de 31 de octubre se han registrado 548, en la misma fecha del año anterior se alcanzó el millar, lo que según ella evidencia un avance en el tratamiento de estos casos. Aunque las denuncias interpuestas en Comisaría apenas han experimentado cambios, con 329 en lo que va de año, el Centro Asesor de la Mujer ha pasado de 1.763 intervenciones a 1.468, lo que la concejala ha interpretado en clave positiva.

“Ha habido menos asistencias sobre todo jurídicas, lo que quiere decir que las mujeres están teniendo un mayor conocimiento del problema y que nuestras medidas están dando resultado. Hace unos años no existían los grupos terapeúticos, mientras que ahora se ofrecen servicios más especializados. En general, hay una sensibilización mucho mayor”. En este aspecto, la delegada ha destacado la prevención como su gran apuesta, expresando su preocupación por el hecho de que el perfil del matratador cada vez se encuadre dentro de edades más tempranas. “Antes eran los más mayores los que ejercían esta violencia. Ahora, la mayoría se trata de personas de entre 36 y 45 años sin estudios cualificados, pero es un perfil que va bajando cada vez más”.

Por ello, su campo de intervención se centrará en la actuación con jóvenes, cuya asistencia por episodios relacionados con esta lacra se ha incrementado en un 5%, dándose casos incluso de tres chicas menores de 15 años que han acudido a la Delegación con sus padres, como víctimas de violencia de género. Para ello, esta área municipal ha puesto en marcha un programa específico de asesoramiento con una presencia en colegios que ha aumentado un 20% en el último año. Se espera que a lo largo de este curso sean 700 los estudiantes en riesgo de exlusión social que se beneficien de estas actividades. Junto a ello, Paredes ha resaltado la puesta en marcha del punto de encuentro familiar de carácter público, el plan de asociación municipal y el Observatorio Local contra la Violencia de Género, que será constituido de forma oficial el 23 de noviembre.

Durante su comparecencia, la delegada ha aprovechado para criticar nuevamente a la Junta de Andalucía, lamentando que se haya reducido considerablemente el presupuesto para servicios tan básicos como el CIM (Centro de Intervención con Mujeres), de tal forma que la administración autonómica solo aporte el 24,95% de la financiación, dependiendo el resto de las arcas municipales. Una circunstancia que no hace sino poner de manifiesto, como insiste la concejala, “la importante apuesta de este gobierno por las políticas sociales”.